No existe una rutina "perfecta" para irse a la cama, pero considere la posibilidad de añadir algunos de estos pasos a su rutina nocturna:

  • Programa un temporizador de "hora de acostarse". Algunas aplicaciones incluso envían una alerta de "relajación".
  • Date un baño o una ducha caliente (si tu piel puede soportarlo) una o dos horas antes de acostarte.
  • Evite las pantallas en la cama y durante aproximadamente una hora antes de acostarse. A algunas personas les gusta leer, ya que ayuda a cansar los ojos.
  • Escribe un diario, reza y/o medita para reflexionar sobre el día.
  • Utiliza aceites de lavanda u otros aceites de aromaterapia o velas para activar las escenas en las que es hora de relajarse. (¡No olvides apagar una vela!)
  • Vístete para estar cómodo.
  • Baja la temperatura de la habitación. La mayoría de la gente duerme mejor cuando la habitación está más fresca que caliente.
  • Oscurece la habitación: apaga las luces, cierra las persianas y crea un espacio oscuro.
  • Haz todo lo posible por relajarte y desconectar. Lo sabemos, que te digan que te relajes es contraproducente, pero si puedes encontrar una rutina que te funcione, ¡utilízala!

Siga una rutina similar cada noche para enseñar a su cerebro y a su cuerpo que es hora de descansar.