Conozca a Mia Batista, de Oklahoma, que tiene un millón de habitantes

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MEET MIA /CONOZCA A MIA

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Paciente/Sobreviviente
Oklahoma City, Oklahoma

MIA'S STORY/LA HISTORIA DE MIA

As told by Mia's mother, Brenda / Contada por la mamá de Mia, Brenda

Mia tiene 11 años y siempre ha sido una niña muy activa. Nunca tuvo problemas estomacales mientras crecía. Sin embargo, alrededor de marzo/abril de 2018 comenzó a experimentar fatiga severa y a no comer bien. Pensé que se debía a un estirón.

Mia tiene 11 años, y siempre había sido una niña muy activa, y jamás había tenido problemas estomacales. Aproximadamente en marzo/abril del 2018, ella empezó a estar muy cansada y dormir de más y a no comer bien. Pensé que se debía a que estaba creciendo.

De repente, Mia empezó a tener problemas estomacales que fueron empeorando, con aumento del dolor de estómago, náuseas y vómitos. Así que tuve que llevarla al hospital, donde me dijeron que solo era un virus y le dieron medicación para evitar las náuseas.

Mia empezó a tener problemas de estómago que nada más empeoraron, le dolía su pancita, tenía náusea, y vomitaba. La llevé al hospital, pero me dijeron que era un virus, y le dieron medicamento para la náusea.

Acabamos llevándola a tres hospitales distintos porque no mejoraba. Pero siempre nos decían lo mismo: es un virus. Llegó un momento en que no podía retener nada, incluso vomitó la medicación. En el hospital les dije que no podía llevarla a casa, no cuando llevaba cinco días sin comer nada.

Acabamos por llevarla a tres hospitales diferentes, por que su condición no mejoraba. Nos seguían diciendo lo mismo, que era un virus. Llegó al punto en el que ella no retenía nada en su pancita, incluso vomitaba la medicina. Les dije al los del hospital que yo no me la podía llevar a la casa, que no había comido por cinco días.

A Mia acabaron diagnosticándole anemia y deshidratación y la mantuvieron en el hospital para hidratarla a través de una sonda. Al cabo de unos días, se dieron cuenta de que estaba estreñida y ni siquiera expulsaba gases, y decidieron hacerle un escáner. Vieron masas extrañas en su estómago y decidieron operarla el 19 de junio.

A Mia la diagnosticaron con anemia y también estaba deshidratada, así que se quedó en el hospital para que le pasaran suero. Después de algunos días, se dieron cuenta que ella estaba estreñida y que no podía echar gas. Decidieron escalera su estómago, y encontraron algo que pensaron que se había tragado. Se hizo cirugía el 19 de junio.

Se suponía que la operación iba a durar una hora y media, pero acabó durando cinco horas. Me dijeron que habían encontrado un tumor, además de otros tumores que habían hecho metástasis. No podían operar a menos que Mia hiciera quimioterapia, y mi mundo se vino abajo.

La cirugía se supone nada más iba a durar una hora y media, pero duró cinco. Me avisaron que habían encontrado un tumor, más otros tumores que se había esparcido. Tienen que esperar a hacer más cirugía hasta después de que Mia haga su quicio. Mi mundo se me vino abajo con esa noticia.

Tras analizar los tumores, resultó ser un cáncer de colon en estadio IV. Le instalaron el puerto el 25 de julio, porque estaban esperando a que se curara tras la operación.

Después de mandar muestras de los tumores a patología, resultó ser cáncer de colon en la cuarta etapa. Su puerto fue instalado el 25 de julio, ya que estaban esperando a que se recuperara de la cirugía.

Mia está recibiendo tratamiento en el Hospital Infantil de la OU. Dejé de trabajar para poder cuidar de Mia, y mi marido es ahora el único sostén de la familia. Estamos muy tristes, por supuesto, pero tenemos fe en Dios en que todo saldrá bien.

Actualmente está siendo tratada en el OU Children's Hospital. Dejé de trabajar para poder cuidar a Mía, y mi esposo ahora es el único que trabaja. Estamos muy tristes, pero confiamos en Diosito que todo va a salir bien.

7 thoughts on "Meet the One Million Strong – Mia Batista from Oklahoma"

  1. Todos estamos tristes esta noche. Nuestros corazones pesados sangran azul para usted. Este angelito llegó a nuestras vidas hace sólo unos meses. Mia, eres una verdadera guerrera. Has luchado. Mis hijas siempre te recordarán. Descansa en paz, libre de dolor. Vela por todos nosotros. Especialmente a los que continúan la lucha.????????????????????

  2. Mia y moma, sé exactamente por lo que estáis pasando. A mi hijo le diagnosticaron osteosarcoma a los 16 años. Empezó cuando estaba en su trabajo después de clase en un restaurante de comida rápida. Se resbaló y se hizo daño en la espalda, eso creíamos. Resultó ser un osteosarcoma en el sacro. Antes de saberlo, lo había llevado al médico porque el dolor era insoportable. Como me acababa de divorciar, el médico dijo que mi hijo quería atención. Le dije que mi hijo nunca lloraba y me dijo que le diera Tylenol y nos mandó de vuelta. Mi hijo no podía dormir tumbado en la cama, así que intentó dormir en el suelo. El dolor era tan fuerte que mis otros hijos y yo tampoco podíamos dormir. Todos estábamos muy preocupados. A la mañana siguiente mi hijo me llamó al baño y estaba sangrando mucho por el pene. Llamé rápidamente al médico y le pregunté si debía sangrar para llamar la atención. Me preguntó de dónde sangraba y se lo dije. Rápidamente me pidió que le llevara al hospital. Varios médicos le estaban esperando. Tardaron un par de horas en descubrir que tenía cáncer. Fue el peor día de mi vida. Uno de los médicos me dijo que tenía que llevarle al centro oncológico MD Anderson. Le dieron morfina y volamos a Houston. Acabamos quedándonos casi 5 años. Mi hijo tiene ahora 41 años. Doy gracias al Señor todos los días por haberme permitido tener a mi hijo todos estos años.
    Mia, ¡sé fuerte, puedes hacerlo! Confía en el Señor con todo tu corazón. Así es como mi hijo y yo superamos esto. Se fuerte por tu hija mama. Te tendré en mis oraciones.❤️????????

  3. Como padre, la pesadilla es enfrentarnos a nuestra impotencia ante una situación como ésta. Cuando la vida de nuestros hijos se nos escapa de las manos, es una sensación horrible y paralizante. La fe y el apoyo de nuestros seres queridos son la única manera de superar la prueba. Como padre, me duele el corazón por Mia y su familia.

  4. Se me parte el corazón por Mia porque sé lo que es que te diagnostiquen tan joven. A mí me diagnosticaron cáncer colorrectal en estadio cuatro cuando tenía 18 años. Mi mundo dio un vuelco y se convirtió en visitas al hospital y espera de los resultados de los escáneres. Ahora estoy en remisión, tengo 20 años. Ella puede vencer esto, lo sé. Sé lo que es esto para ella y sé que todo va a salir bien. Mantente fuerte Mia y NUNCA olvides que el cáncer no te define. He publicado mi historia similar en este blog también. Oraciones para usted girly, usted consiguió esto.

  5. Me senté aquí bebiendo mis lágrimas. A mi hija de 13 años le diagnosticaron en agosto poliposis adenomatosa familiar. Le extirparon 5 pólipos del estómago mediante una endoscopia. Nunca habían visto a nadie tan joven con tantos a esa edad y no sabían cómo proceder. Y aquí estamos.

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